Nombres de vampiros mujeres: Azeman

El vampiro es, sin duda alguna, uno de los seres míticos más apasionantes de la historia humana y extendidos alrededor del mundo; podemos afirmar sin temor a equivocarnos que, con toda seguridad y aún sin mencionar la palabra “vampiro,” en cada cultura existe alguna leyenda relacionada con este ser nocturno que se alimenta de la sangre o de la energía del ser humano, seres con capacidad de transformarse en ratas o animales con el fin de salir huyendo cuando se sienten amenazados.

El murciélago es el animal que por antonomasia está relacionado con los vampiros y siempre que hablamos de estos nos viene a la mente el ser seductor de largos colmillos o bien, el murciélago en pleno vuelo nocturno para llegar hasta sus víctimas; no es de extrañar que muchas especies de murciélagos se hayan visto amenazadas y al borde de la extinción gracias a estas leyendas.

Cabe señalar que en la vida real son muy pocas las especies de murciélagos hematófagos, es decir, murciélagos que se alimentan de la sangre de otros animales, pero que nada tienen que ver con los vampiros de las leyendas, así que tampoco hay nada de qué temerles; aunque siempre surge la duda, ¿de dónde surge la leyenda que el vampiro se transforma en murciélago?

Para encontrar los vestigios del vampiro murciélago quizá tengamos que dirigirnos a Surinam y la Guayana Holandesa, dos países de América del Sur, donde existe la leyenda de Azeman, un caso raro y único en su tipo de vampiro que se puede convertir realmente en murciélago; otro dato curioso de este vampiro es que, a diferencia de los vampiros más famosos de la historia, no estamos hablando de un hombre, sino de una mujer cuya sangre fue infectada por otro azeman, es decir, que cuando hablamos de azeman sólo hablamos de mujeres.

Como hemos visto, la azeman es realmente única entre todos los vampiros existentes alrededor del mundo al tener el poder de convertirse en murciélago cuando cae la noche y salir en busca de una mujer que duerma con los pies desnudos, esto con el fin de poder arrancar la carne del dedo del pie de la víctima y beber de su sangre; cuando se ha saciado, regresa volando a su hogar. La víctima se debilita, mientras que la azeman parece gozar de mejor salud conforme pasan los días; sin embargo, para luchar contra estos seres no son necesarios los crucifijos, ni las estacas de madera, pues existen tres formas bien conocidad de deshacerse de ellas:

1. Colocar una escoba frente a la puerta de tu hogar.
2. Colocar varias escobas en el piso de tu casa: las azeman tienen una extraña obsesión por contar las cerdas de las escobas al grado de olvidarse de su propia alimentación y seguridad, y pasan la noche entretenidas con las cerdas sin darse cuenta que llega la mañana, que es cuando la luz del sol la convierte en polvo.
3. La tercer forma de acabar con ella, y quizá la más efectiva, es encontrar la piel que utiliza para cubrirse y esparcirle pimienta a la que es alérgica, esta piel le otorga poder y sin ella puede debilitarse y morir de hambre.