Desde tiempos muy remotos el ser humano ha estado interesado en conocer su futuro y ha creído fielmente que todo lo que tenga que ver con su vida está relacionado con designios que se encuentran fuera de su alcance: Dios, suerte, destino, astros.
Dentro de todo este cúmulo de creencias, el movimiento de los astros y su influencia en el porvenir del ser humano ha sido quizá la obsesión más recurrente del hombre para tratar de explicarse a sí mismo y su andar. No es de sorprender que muchas de las civilizaciones más antiguas hayan basado su existencia en las estrellas, los planetas y todo lo que estaba al alcance de su vista cuando observaban al cielo, la mayoría de los calendarios del hombre antiguo tienen una base astrológica: los antiguos griegos representaban a muchos de sus dioses y héroes mitológicos con las figuras que forman las estrellas; la civilización egipcia tenía un calendario de 18 meses basado en los movimientos lunares; los mayas en la América precolombina crearon un calendario solar que, se afirma incluso, es más exacto que el calendario gregoriano utilizado actualmente, además las ciudades mayas fueron construidas a manera de escenificar los movimientos del cielo en la Tierra.
De hecho, la civilización actual sigue teniendo una estrecha relación con los astros, por ejemplo, los días de la semana están basados en los siete cuerpos celestes más visibles y reconocibles del firmamento:
- Lunes – día de la Luna
- Martes – Marte
- Miércoles – Mercurio
- Jueves – Júpiter
- Viernes – Venus
- Sábado – Saturno
- Domingo – Sol
Ha sido tal la influencia que los astros han ejercido en el ser humano que resulta comprensible que durante milenios el hombre haya relacionado cualquier suceso terrestre con el movimiento astral. De esta manera, hace aproximadamente 5000 años en Babilonia nace la astrología con la cual se ha buscado explicar el movimiento de los humanos basado en el movimiento de la bóveda celeste y mezclado además con creencias de tipo religioso y esotérico.
No es extraño, que la astrología al ser una mezcla de conocimientos basada en los astros, creencias de tipo religioso, adivinaciones y predicciones, se haya separado de la astronomía (que es el estudio científico de los astros) y comenzara a ser fuertemente criticada por la ciencia y diversas religiones, especialmente la católica. En el Concilio de Toledo en 400 d.C y el Concilio de Braga en 561 d.C, entre otros, se rechaza cualquier tipo de adivinación basada en los astros pues va en contra de los designios de Dios quien es el único que puede decidir sobre el hombre; aunque no deja de ser curioso encontrar algunas referencias astrológicas en los escritos bíblicos, como es el caso de la llegada de los Reyes Magos a Belén siguiendo una estrella.
Sin embargo, a pesar de las duras críticas y cuestionamientos que ha recibido la astrología durante la historia humana, no se puede negar que sigue siendo uno de los grandes enigmas para el ser humano quien ha creado cualquier clase de métodos para explicar la influencia de los astros sobre la vida de una persona. Una de las manifestaciones más importantes de la astrología es el horóscopo que, como se explica en la Wikipedia, no es otra cosa más que “…una representación gráfica de las posiciones planetarias en un momento especial; que normalmente es el de nacimiento de una persona…”, es decir, el horóscopo es una forma de explicar al ser humano conforme a la manera en la que los astros estaban ubicados al momento exacto de nuestro nacimiento.
Con base en la fecha, hora y lugar exactos de nuestro nacimiento en relación con la posición que el sol y las constelaciones tenían en ese momento es posible saber nuestro signo zodiacal que va a regir tanto la personalidad como los sucesos de nuestra vida. Los signos del zodíaco son 12:
- Aries – del 21 de marzo al 20 de abril
- Tauro – del 21 de abril al 21 de mayo
- Géminis – del 22 de mayo al 21 de junio
- Cáncer – del 21 de junio al 23 de julio
- Leo – del 24 de julio al 23 de agosto
- Virgo – del 24 de agosto al 23 de septiembre
- Libra – del 24 de septiembre al 23 de octubre
- Escorpio – del 24 de octubre al 22 de noviembre
- Sagitario – del 23 de noviembre al 21 de diciembre
- Capricornio – del 22 de diciembre al 20 de enero
- Acuario – del 21 de enero al 19 de febrero
- Piscis – de 20 de febrero al 20 de marzo
Como se habrán dado cuenta, hablar de astrología y predicciones basadas en el horóscopo es un tema tan amplio y complejo que difícilmente se podría cubrir en un sólo post; así que en este lo único que intentamos fue explicar las cuestiones más generales con el fin de entender un poco este tema tan interesante.
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